sábado, 13 de abril de 2013



LECTINAS

Fuentes: Nuestras aliadas y nuestras enemigas y Conasi.eu

Se trata de un grupo de proteínas de origen no inmune que están presentes en la mayoría de los seres vivos, tanto en el reino animal, vegetal y en microorganismos como bacterias, protozoarios y virus.
Por su capacidad para unirse, de manera reversible, a un determinado grupo de carbohidratos, sin alterar su estructura, se utilizan frecuentemente como reactivos.
Como proteínas que son, al entrar en nuestro sistema digestivo deberían hidrolizarse (es decir, dividirse en sus componentes más pequeños, los aminoácidos). Pero es normal que una pequeña parte pase a la sangre (una de las causas es la hiperpermeabilidad de la mucosa intestinal). Aquí se produce un mecanismo diferente de la reacción inmunitaria antes descrita: las lectinas se aglutinan con las células de la sangre.
- Es la misma reacción que ocurre cuando entran en contacto dos sangres de diferente grupo sanguíneo. Las células de la sangre tienen en su superficie unos antígenos, es decir, unos marcadores, diferentes según si la sangre es del tipo 0, A, B ó AB. Estos antígenos están encargados de detectar si entra una sustancia extraña que hay que eliminar. Se ponen en marcha cuando entra un intruso microbiano, o cuando entra sangre de un grupo sanguíneo diferente al suyo, o cuando entran alimentos con lectinas. Lo normal es que el 95% de las lectinas de la dieta se eliminen, pero un 5% se infiltran en el torrente sanguíneo.
En todos los casos se pone en marcha un proceso de aglutinación como para hacer “pegotes” de esos productos que considera indeseables, para que luego sean retirados por otros miembros del sistema inmune.
Con las lectinas de los alimentos también ocurre esta reacción. Puede ocurrir en las paredes del estómago y del tracto intestinal, produciendo inflamación de la sensible mucosa intestinal y una acción aglutinante que parece una alergia alimentaria. O puede ser que pasen a la sangre y produzcan daños en cualquier lugar en que se produzca la reacción (sobretodo a nivel renal o articular).
Estas reacciones son visibles al microscopio al exponer cierto tipo de sangre con cada alimento. No obstante, la medicina oficial no considera relevante el daño que pueda ocasionar ese 5% de lectinas que pasan a la sangre.

- O sea, que la sangre de cada grupo sanguíneo reacciona contra unos alimentos determinados. En el caso de la leche es un alimento conflictivo para todos los grupos, excepto para el B (los mongoles por ejemplo son de este grupo).
Aunque no sea de nuestro gusto, porque preferiríamos que todo valiese, en realidad no todo vale en alimentación. Nuestro cuerpo no puede aceptarlo todo, estamos determinados genéticamente.  O sea, que está determinado genéticamente qué alimentos nos convienen, igual que está determinado el color del pelo, el sexo, o nuestro grupo sanguíneo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario